"Clima de miedo" de Wole SOYINKA (2004)

Mi opinión:
Un libro que, a pesar de recoger cinco conferencias que Wole Soyinka pronunció en 2004, sigue siendo de una actualidad apremiante. Deja bastante al margen la teoría de lo que podríamos conocer como miedo (ejercido por el aparato estatal, o por cuasi-estados, organizaciones terroristas, etc.), y hace mucho hincapié en la práctica, en como Estados actuales y otras organizaciones fuera del ámbito estatal ejercen ese miedo y lo extienden por doquier.
Una buena lectura para aquell@s que estén interesados en política internacional.

Contraportada (Ensayo - Tusquets):
A lo largo del siglo xx, el miedo ha ido adquiriendo máscaras cambiantes: si al principio tenía que ver sobre todo con el sometimiento masivo a dictaduras y totalitarismos, años después predominó el miedo a un Apocalipsis nuclear. Pero en las últimas décadas, sobre todo desde el 11-S, una violencia terrorista indiscriminada, con el lema implícito de que nadie es inocente, nos ha convertido a todos en sus posibles víctimas.

CLIMA DE MIEDO recoge las cinco conferencias que el Premio Nobel de Literatura Wole Soyinka impartió en 2004 en el prestigioso ciclo de las Conferencias Reith, y aborda un rasgo fundamental de la política mundial contemporánea: la creciente precariedad de las garantías democráticas y de los derechos humanos. En efecto, en todos los rincones del planeta aumenta la sensación de amenaza ante un poder anónimo y despiadado. Basándose en su conocimiento de los dramas recientes de la política africana, pero también en las informaciones que nos llegan del caos en Irak o del fundamentalismo de Al Qaeda, Soyinka nos habla en estas páginas de un combate entre el humanismo y la degradación, entre el fanatismo identitario y religioso y el respeto a los derechos humanos, entre la imposición del poder y la libertad. ¿Cabe todavía la esperanza ante el auge del terror y las torpes respuestas que hasta ahora se le han dado? Para este gran escritor africano, sólo la cultura, la tolerancia y el reconocimiento de la dignidad humana pueden sacarnos del atolladero.

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